Laura Wasser.
- Comunicar las expectativas matrimoniales antes del “sí, quiero”. Una pareja debería discutir cuestiones como:
- Hijos. ¿Los queremos? ¿Los vamos a enviar a una escuela privada o pública?
- Religión. ¿Cómo vamos a practicarla?.
- Dinero. “Hablar de ingresos y cuentas bancarias conjuntas o separadas no es atractivo, pero prolongará la relación porque estarán en sintonía”.
- Apostar siempre por el acuerdo prenupcial que establezca cómo se manejarán bienes, deudas y otros aspectos económicos en caso de divorcio, separación o fallecimiento de la pareja.
- No escatimar en el abogado. Informarse bien antes de elegir abogado para un divorcio. Debe haber buena química ya que estarán viéndose unos meses. Evitar a los letrados que son extremadamente agresivos.
- Olvidar el drama. Trata el tema con sensibilidad.
- Estar bien informado de la situación financiera. Las cuatro áreas que se deben conocer son: activos, deudas, ingresos y gastos.
- Ahorrar dinero en el propio proceso de divorcio. Considerar la posibilidad de divorciarse online. Recomienda repartir todo de la forma más rápida, amistosa y equitativa posible.
- Poner a los hijos primero. Parece la regla más evidente, pero muchas veces no se cumple. "Sigues compartiendo una familia”.


